SEATTLE — Miles de familias locales enfrentan incertidumbre mientras el cierre del gobierno federal amenaza con detener el financiamiento de los programas Head Start en todo el oeste de Washington, programas que atienden a muchos de los niños más vulnerables de la región.
Al menos 18 programas Head Start en los condados de King y Pierce, todos supervisados por el Distrito de Servicios Educativos de Puget Sound (PSESD), están a punto de cerrar sus puertas. Para las familias, los educadores y los niños, es una crisis emocional y económica.
“Es desgarrador, ¿verdad? Simplemente desgarrador que los niños y las familias se vean afectados por una crisis fabricada”, dijo Lori Pittman del Distrito de Servicios Educativos de Puget Sound.
Estos 18 programas Head Start bajo PSESD brindan oportunidades de aprendizaje temprano a más de 1,200 familias, en su mayoría de bajos ingresos, en la región. Pero con los nuevos fondos federales ahora suspendidos, muchos centros dicen que es posible que no puedan permanecer abiertos más allá de noviembre.
“Normalmente obtendríamos financiación a partir de mañana, y no vamos a tener esa financiación”, dijo Pittman. “Así que todos estamos luchando por saber cómo permanecer abiertos con cero dólares”.
Para la madre soltera Sohalia Ganje, que tiene cuatro hijos, incluido uno de dos años, en un programa Head Start en White Center, el Centro de Aprendizaje Temprano Educare, la idea de perder ese apoyo es abrumadora.
“El aprendizaje temprano es realmente importante”, dijo Ganje. “Los programas que atienden a algunas de las familias más vulnerables deben permanecer abiertos y deben financiarlo”.
Ganje describe el dilema que muchos padres enfrentan ahora: hacer malabarismos con el trabajo, el cuidado y la educación temprana de sus hijos sin la ayuda de Head Start.
“Me siento como si estuviera atrapada entre darles un lugar seguro para aprender y crecer y ponerlos en algún lugar… donde nadie realmente les preste atención”, dijo. “Como educador, eso se siente horrible”.
El Distrito de Servicios Educativos de Puget Sound ha obtenido fondos de emergencia para mantener las aulas abiertas hasta finales de noviembre. Pero más allá de eso, afirma Pittman, el futuro es incierto.
“A menos que una gran donación provenga de alguien que aún no se haya presentado, esa es la única manera de que podamos permanecer abiertos después del 30 de noviembre”, dijo.
Si no llegan los fondos, más de 900 miembros del personal bajo los programas Head Start de PSESD podrían enfrentar despidos o suspensiones a partir del 1 de diciembre.
“Nuestra solución es apoyarnos, cuidar al prójimo y ser comunidad”, dijo Ganje. “Pero cuando no todos lo tenemos, ¿qué hacemos?”
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