SEATTLE – Más de treinta años después de la desaparición de Tanya Frazier, de 14 años, en el barrio de Capitol Hill, Seattle, las autoridades han arrestado a un hombre con antecedentes penales previos relacionados con su asesinato. El avance fue posible gracias a recientes progresos en la tecnología de ADN, lo que permitió resolver un caso que permaneció sin resolver durante décadas. Capitol Hill es un barrio vibrante y diverso de Seattle, conocido por su vida nocturna y su comunidad LGBTQ+.
Mark Russ compareció el martes por la mañana ante un juez en el Tribunal Superior del Condado de King, donde se declaró no culpable de los cargos de asesinato. La madre y la hermana de Frazier asistieron a la audiencia, siendo la primera vez que presenciaron cara a cara al presunto asesino. Este momento, cargado de emoción y dolor, fue significativo para la familia, que ha vivido con la incertidumbre durante décadas.
Tanya Frazier desapareció el 18 de julio de 1994, después de asistir a clases de verano. Cinco días después, un vecino encontró su cuerpo en un barranco, una zona recóndita y siniestra. Según los fiscales, Frazier sufrió heridas por fuerza contundente en la cabeza y el cuello, y alegaron que Russ portaba un arma mortal y que el crimen tuvo una motivación sexual. Es importante destacar que la violencia de género es un problema grave en la sociedad, y este caso es un trágico ejemplo de ello.
“Nunca imaginé este momento. No pensé que lo tendríamos”, declaró Teara Frazier, la hermana de la víctima, quien estaba a punto de cumplir 13 años cuando su hermana fue asesinada. Esta declaración refleja la profunda herida que ha dejado este crimen en la familia y la comunidad.
El avance se logró después de que los investigadores aplicaran técnicas avanzadas de análisis de ADN a pruebas recolectadas del cuerpo de la víctima hace décadas. Si bien el análisis inicial de ADN no arrojó resultados concluyentes, las autoridades indicaron que las técnicas modernas permitieron identificar un perfil de ADN de una sola fuente que coincide con Russ, quien actualmente se encuentra detenido en la cárcel del Condado de King. El uso de la tecnología de ADN para resolver crímenes sin resolver es una herramienta cada vez más importante para la justicia.
Unas dos semanas antes de la comparecencia judicial del martes, el jefe de policía de Seattle anunció el arresto, afirmando: “Finalmente hemos encontrado al hombre responsable”. Este anuncio generó esperanza y alivio en la comunidad.
Rose Winquist, una investigadora privada que trabajó en el caso, comentó que anticipaba este resultado.
“Sabía que llegaría este día alrededor de 1995 cuando escuché que había ADN, pero ha tomado tanto tiempo, por qué razones, realmente no estoy segura”, dijo.
Winquist agregó: “aquí estamos hoy, casi 32 años después, mirando a este brutal hombre”.
La próxima audiencia en el caso está programada para diciembre.
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