SEATTLE – Amazon destinará más de 3 millones de dólares a 10,000 repartidores independientes para resolver acusaciones de incumplimiento de las leyes de protección laboral para trabajadores de aplicaciones en la ciudad de Seattle. Esta situación pone de relieve la creciente atención hacia las condiciones laborales en ciudades como Seattle, donde la economía ‘gig’ o de trabajo por encargo es significativa y afecta a un gran número de trabajadores.
La Oficina de Normas Laborales (OLS) de Seattle argumenta que el servicio Amazon Flex, que permite a personas contratar con la empresa para entregar paquetes, alimentos y otros productos utilizando sus propios vehículos, no distribuyó de manera equitativa bonificaciones, días de enfermedad pagados y otros beneficios a todos los trabajadores. Es importante señalar que este tipo de trabajo, común en Estados Unidos, a menudo se realiza sin las mismas protecciones y beneficios laborales tradicionales.
Amazon Flex niega las acusaciones, pero ha acordado resolver el caso pagando 3.7 millones de dólares a 10,968 trabajadores afectados, además de una multa de 20,000 dólares a la ciudad de Seattle. Los trabajadores afectados recibirán los pagos correspondientes a partir del próximo año.
Las regulaciones de Seattle, diseñadas para proteger a los trabajadores de aplicaciones, exigen que todas las empresas que contratan este tipo de personal garanticen un salario mínimo, días libres pagados y protección contra despidos injustificados. Esta legislación busca equilibrar las condiciones en un sector donde las condiciones laborales pueden ser precarias.
Órdenes específicas que entraron en vigor durante la pandemia de COVID-19 también requerían un pago adicional por ciertos tipos de trabajo; estas órdenes ya no están vigentes, pero a la OLS se le permitió investigar y hacer cumplir retroactivamente esas órdenes hasta octubre de este año. Esto refleja la preocupación por la protección de los trabajadores durante la crisis sanitaria.
La OLS alega que, entre 2021 y 2022, Amazon Flex no proporcionó bonificaciones a los repartidores independientes que recogían o entregaban envíos en el área de Seattle, a menos que estuvieran relacionados con sus líneas de negocio de alimentos y comestibles. Además, entre el 31 de enero de 2021 y el 12 de enero de 2024, la OLS alega que la empresa no estableció un sistema que permitiera a ciertos trabajadores solicitar días de enfermedad o licencias familiares pagadas, y no informó a los empleados sobre el tiempo libre disponible.
“Los trabajadores independientes estuvieron en la primera línea durante toda la pandemia, brindando servicios esenciales como entrega de alimentos y provisiones a nuestros vecinos y personas mayores vulnerables”, declaró el alcalde Bruce Harrell. “Estos trabajadores siguen siendo una parte valiosa de nuestra fuerza laboral hoy y merecen un salario justo y protecciones. A medida que trabajamos para construir una economía de trabajo independiente justa y equitativa, este acuerdo demuestra el compromiso de Seattle para proteger los derechos de los trabajadores y responsabilizar a las empresas cuando no cumplen con sus obligaciones legales”.
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